Nos encontramos en plena Semana contra el Desperdicio Alimentario (del 25 de septiembre al 1 de octubre).
El primer Banco de Alimentos surgió en el año 1967 en EE.UU, en Phoenix (Arizona). Tantos años después, los Bancos de Alimentos seguimos reaprovechando alimentos en beneficio de las personas más vulnerables y con la vocación de generar un alto impacto social y medioambiental, que es, a su vez, un aporte relevante en la lucha contra el desperdicio alimentario.
En esta Semana contra el Desperdicio Alimentario, nos unimos a esta campaña como uno de los principales motores de la lucha contra el desperdicio.
Porque los Bancos de Alimentos somos un equipo de voluntarios profesional y responsable en la lucha contra la pobreza que, ante la llegada de nuevas necesidades y un nuevo contexto regulatorio, mantenemos nuestro compromiso y “Levantamos la mano contra el desperdicio”.
